Menesianos

Quiero agradecerles profundamente la posibilidad  que me dieron de volver a encontrarme con los sentimientos Menesianos a través de este viaje a la comunidad de Mendoza con motivo de la profesión perpetua del Hno Juan  Alberto, quien con sus palabras en la ceremonia me hizo saltar lágrimas al verlo tan feliz y decidido en su vocación.Mi agradecimiento es para todos, todos con los que compartí esos días, HH (de aquí y de allá), laicos y jóvenes, con quien he compartido no solo unos días muy hermosos sino que he podido, a través de ustedes, ver más allá… A partir de sus actos y mis vivencias entendí hasta donde están involucrados en el amor y los problemas de los pequeños (como dice Jesús) según me lo contó Wences en el viaje de regreso.

Me llamó mucho la atención la amistad que existe entre ustedes, el afecto con que se tratan, como se divierten en los tiempos libres, como se buscan, llaman o preguntan antes de almorzar o cenar cuando alguien no se encuentra…

Realmente es digno de que muchas personas sepan de esta misión que realizan en el mundo y a mi manera ya lo estoy haciendo con mis compañeros de trabajo y en mi ámbito laboral.

No se si pude transmitir todo lo que experimente porque es difícil expresarlo en un mail pero hoy es la única forma que puedo hacerlo. Gracias por haberme permito conocerlos acercándome a ustedes, tal vez Jesús sepa el porque. Un fuerte abrazo a todos.

Tato Bella

Que lindo es ver que un corazón se funde con el de Jesús como lo hizo el H Juan Alberto. Es bello encontrar personas que se la jueguen y lo sigan haciendo. Eso es lo que sentí cuando empecé a vivir tantos momentos ese finde… desde la oración del viernes, hasta el almuerzo del domingo en Agrelo… nos sentimos parte de la gran familia menesiana que se seguía juntando para festejar.

En la misa me toco presentar su cruz de profesión, eso marcó. Llevé esa cruz por la que él se jugó todo y más, esa cruz a la cual él esta abrazado y lo seguirá estando, y no me cabe duda, que lo hará por siempre, tanto y en cuanto su humana debilidad se lo permita, se irá revistiendo de los sentimientos de Cristo Jesús.

Pude vivir todo eso que fue muy lindo, grande y simple. como son las cosas de DIOS. Yo fui testigo de su SI. Eso despierta muchos sentimientos en mí. Hoy sólo tengo para decir GRACIAS. GRACIAS por acompañarme, por guiarme, por ser fiel a DIOS. Te quiero.

Walter Muños (Wally)

QUERIDOS HERMANOS quiero compartir con ustedes la experiencia vivida en la ceremonia de los votos perpetuos del hermano JUAN ALBERTO… Cuánta emoción!!! Cuánta alegría al ver la entrega de Juan al Padre celestial, su renuncia a todo lo terrenal, para solo elegir su camino, para conocer a través de sus actos, COMO HABITA JESUS EN EL!!!! COMO TRASMITE SU AMOR!!!¡Que lindo sería que surgieran otras vocaciones, como la de Juan, que muchos jóvenes quieran ser hermanos menesianos! Es el regalo más bonito que la madre MARIA les puede hacer. Tal decisión cambia totalmente la vida de esa persona elegida y la de toda su familia.

En la ceremonia se vivió la gracia de poder estar en el cielo por un momento, se sentían las presencias celestiales que acompañaban a JUAN, el PADRE CELESTIAL, QUIEN LO LLAMO A SEGUIRLO, ESTABA AHI!!!!! QUE HERMOSA EXPERIENCIA, ver los ojos colmados de lágrimas, rostros orgullosos y todos felices de estar cerca de él en ese, su momento más importante, el mejor de su vida, el de permanecer en la cruz con Jesús para siempre!!!

¡Cuántas cosas bonitas se viven en una profesión, qué bello ver como llama Jesús, para que en medio de los niños y jóvenes, SIGAN SURGIENDO VOCACIONES. ASI TE SIGUES REFLEJANDO EN ELLOS SEÑOR!!! y así ayudar a cuanto hermano lo necesite, con un simple gesto, con una palabra, con solo tu presencia SEÑOR a través de ese TU SERVIDOR!!!

No me queda más que agradecer al hermano JUAN ALBERTO por haberme permitido compartir con él esta hermosa profesión, la que el día 10-10-2009 se transformo en perpetua. Un orgullo para quienes lo rodeamos porque a pesar de su corta edad, ha decido seguir a JESUS para siempre.

Ranaldi Sabrina Soledad